La semana del roce

#Atenci'on, post sin acentos ni enyes por la gracia de dios y microsof#

Este lunes empez'o la semana del roce. Este es el termino con el que la comunidad de los navajeros de Limerick (todos espanyoles, erasmuseros y desalmados) se refiere a la ultima semana antes de la despedida. La primera semana del roce la instauro C., el cabron que se bajo del barco antes de llegar al puerto, aunque le perdonamos porque lo hizo por amor. Ahora nos toca a todo el resto.

Si senyores (y senyoras), esto se acaba. Entre el dia 30 y el 2 aqui no quedaran mas que los hermanos pinzones, que eran unos maaaariiiiiii....neros. Todo el mundo se vuelve a sus vidas reales, para bien o para mal. El suenyo se acaba.

Atras quedan practicamente nueve meses en los que unos extranyos se convirtieron en tu familia, sin pedir permiso ni esperando que te dieses cuenta. Nueve meses que parecen mentira, y que ninguno de nosotros habria sido capaz de imaginar hace diez.

Aqui hemos coincidido gente que seguramente en otras circumstancias, en otro lugar, en otro momento, no habria congeniado. Gente a que a primera vista era tan distinta como sus pasados, sus expectativas, y sus razones. Gente que ha visto como unos cambiaban de vida mientras a otros la vida les cambiaba. Gente que puede decir, aunque algunos aun no lo sepan, que crecieron en Limerick.

Hay quien ha encontrado lo que venia buscando, desde un descanso de la vida anterior, hasta una carrerilla para saltar a la nueva. Hay quien se ha encontrado con lo inesperado, como una ruptura de una relacion irromplible, hasta amigos que no han permitido aprender ingles. Hay quien ha salido de casa por primera vez, y hay quien no ha parado en casa ni a la de tres. Hay resacas, fiestas, anecdotas, historias, fotos, videos, algunas cicatrices y mil momentos que no querriamos olvidar, pero de los que solo un punyado se salvaran del olvido.

En cualquier caso todos nos vamos a ir de aqui (bueno, algunos nos quedamos un poco mas) con una sonrisa mayor que la que traiamos. Con menos miedos, y mas ligeros de equipaje, porque las cosas importantes de la vida, las que de verdad abrigan en los momentos jodidos, no se llevan en la maleta.