viernes, junio 30, 2006

Árboles artificiales

Se acabó lo que se daba. Exámenes y clases, kaput. Ahora se supone que toca disfrutar de esta extraña sensación de libertad condicional que llaman vacaciones. Haremos lo que podremos.

De momento voy a hacer una escapada a Segovia, a visitar a mis abuelos, que por aquellas cosas de la vida estamos de cumpleños. Cumplir un cuarto de siglo a penas tiene mérito aunque me hace sentir ligeramente más respetable (el otro día mientras volvía a casa un chaval me paró para preguntarme -"Señor, quien ha ganado el partido?". La impresión fué tremenda. Que un niño pequeño te llame señor es justificable, que un chaval quinceañero meta la pata de semejante manera sólo puede deberse a mi gran porte y presencia por lo que creo que creo que en breve podreis empezar a llamarme Don Nacho.)

En cambio mi abuelo cumple 90 años, y eso sí es digno de mención. Ayer hablé con él y me dí cuenta de lo poco que he hablado con él este año. Es cierto que en mi familia somos bastante despegados, y que yo no soy especialmente cariñoso (ni tan siquiera agradable, ni considerado ni nada de eso que hace que la gente merezca la pena) pero la auténtica razón para no haberle llamado más amenudo es una mezcla de egoismo y miedo. Egoismo porque prefiero recordarle tal como le tengo en mi memoria y miedo por tratar de mantener una conversación imposible que nos haga sentir incómodos a los dos.

Hace unos años mi abuelo tuvo un infarto cerebral y afortunadamente sólo le afectó al habla. Se recuperó maravillosamente gracias a la ilusión que tenía por vivir tres cosas: Ver que sus hijas estaban bien, la comunión de mi primo, y que yo acabase la carrera. Yo era lo último en la lista y a falta del proyecto está visto que se saldrá con la suya, me alegro.

Ahora hablar con él por teléfono se ha convertido en un reto, porque él no encuentra las palabras, y yo no entiendo con las que se pierde. Nuestras conversaciones se reducen a decirle lo que estoy haciendo mientras que él sólo me pregunta si estoy contento, a lo que yo siempre le digo que sí (aunque no siempre haya sido verdad). Lo de la carrera ha pasado totalmente a un cuarto o quinto plano y ya podría hacerme fakir que a él seguiría preocupándole simplemente que fuese feliz.

Ayer era su cumpleaños y me dijo que por la noche iban a ver los árboles, árboles artificiales. Claro que en Segovia son fiestas y eran fuegos artificiales. Pero por cada palabra que no sale sabes que mi abuelo sonrie porque esa es ahora su forma de vivir, sonreir y preocuparse por lo que realmente importa.

La semana que viene es el concurso de fuegos artificiales de Tarragona. Ya os digo de antemano que este año voy a ver más de un árbol con una sonrisa de lado a lado.

jueves, junio 29, 2006

Pasatiempos 11

Lo bueno de tener los altavoces del portatil estropeados es que he podido ver este video tan chulo sobre la resonancia sin que me sangrasen los oidos. Para el que lo quiera saber sin buscar entre los cien comentarios del video: el arroz vibra sobre una placa que cubre un altavoz. Dependiendo de la frecuencia el arroz se acumula en unos sitios o en otros, haciendo figuras sorprendentes como por arte de magia.

Vale, hoy tocan videos "científicos". Pero quién ha dicho que la ciencia no es divertida? Ya habeis oido la historia de los Mentos y la Cocacola. Pues en este video podeis llegar a ver los límites de la imaginación, el tiempo libre y la pocafeina de alguna gente. Fascinante.
Las preguntas que surgen después de ver estos videos són:
¿Por qué cocacola light? Porque pringa menos.
¿Qué pasa si te bebes dos litros de cocacola y te comes un puñao de mentos? La respuesta, aquí.

Y si lo que te interesa es mejorar tu memoria, pasa por... era aquí?

Pero si lo que quereis es un jueguecito para pasar el rato en el trabajo... probar el frontón futurista.

Siempre hay alguien con más tiempo libre, como para hacer 629 fotos en 3 horas a las pirámides de Giza y juntarlas en una animación.

Pero si lo tuyo es la información pásate por GreatNewsNetwork, un sitio dedicado a buenas noticias (imprescindible hoy en día!):
"Researchers in the Netherlands found that older men and women judged to have optimistic personalities were less likely to die over
the nine-year study period than those with pessimistic dispositions."
  (por esa regla de tres a Acebes le quedan cuatro días)

miércoles, junio 28, 2006

domingo, junio 25, 2006

Sant Joan un año después

La noche de Sant Joan el año pasado fué una noche agridulce.
Un año después nos volvimos a juntar los implicados y esta vez ha sido una gran noche, en la que la mayoría no se imaginaba como iba a cambiar todo.

Hay que ver como pasa el tiempo, que se hace eterno por delante e ínfimo por detrás.

viernes, junio 23, 2006

Lo que yo decía

A que la afición de brasil no tiene nada de esto.

Flying circus

Ayer a estas horas tuve un sueño. No era una pesadilla propiamente dicha, sino un sueño excesivamente real y doloroso, que me dejó ko para todo el día.

Cambiando de tema, estos días se ve que se celebra el mundial de futbol, mientras nosecuantos miles de jovenes y jovenas (muerte al lenguaje políticamente correcto, pordios!) hacen los exámenes de selectividad. Que gracia.

Será que no lo recuerdo como algo especialmente traumático. Lo curioso es que asocio aquellos tiempos con las clases de filosofía, claro que no criticaré al profesor, no sea que me caiga un puro.

El caso es que entre pitos y flautas digo yo que ya que los pobres y pobras jóvenes y jóvenas (arrgh!) no pueden ver el mundial porque tienen que estudiar, pues que quizás con esto matamos dos pájaros de un tiro. Así se quitan el gusanillo (ellos y ellas, no los pájaros y pájaras) mientras repasan filosofía.



Via: VideoSift


Y sin darnos cuenta ha llegado el verano, hay que ver. Cuando era pequeño la eternidad era lo que separaba el verano de los reyes Magos. Venía a ser algo así como un sandwich de impaciencia (emparedado, leñe, emparedado. Que aunque suene a muro de granito es el palabro que toca, y no esas mariconadas inglesas)

PD: Por qué cuando veo la afición española en el mundial siento vergüenza ajena? ¿Será por esos hombres barrigudos disfrazados de sevillanas/toreros/guardias civiles? O por los desorientados con sombrero mexicano?

PD2: Al final gana Grecia, como debe ser! La buena vida, leñe, la buena vida!

miércoles, junio 21, 2006

Exámenes

La de cosas que se me ocurren para hacer y ya verás como cuando acabe exámenes se me olvidarán todas.



"Mejor que te guste y que aprendas rápido", que gran consejo. Tarde, pero grande.

viernes, junio 16, 2006

Un cuento de mi barrio

En la calle de al lado, en la que nievan flores, hay un loro que silva a la gente que pasa.

Los obreros del gas, que levantaron la calle hace un mes otra vez, se ilusionaron tanto al principio que les costó ponerse a trabajar. Cuando descubrieron que no era una vecina todos llegaron a la conclusión de que era competencia desleal.

La señora Luisa, la del quinto, un día volvió más contenta a casa al confundir al uno con los otros, y desde entonces su matrimonio ha vuelto a ser pleno como hacía tiempo que su Manolo no recordaba.

Manolo por su parte, de puro desconcierto no sabe si ser feliz o empezar a buscarse los cuernos.

Los yupis del edificio de enfrente se giran confundidos cuando cruzan la calle. No tienen costumbres de presa.

En cambio Oscar, el kiosquero, se ha ganado ya un par de guantazos, las amenazas de un marido celoso, muchas sonrisas regaladas y dos nuevas amiguitas en el barrio. Haciendo cuentas dice que ha salido ganando.

Moraleja del tito Javi: Dí cosas bonitas que nunca sabes a quién harás feliz.

PD: Jaquetorra no es algo bonito que puedas decir a nadie en el tren.
PD2: Por muy guiri que parezca siempre es posible que sepa tanto castellano como taekwondo.
PD3: Mi dentista es feliz.

jueves, junio 15, 2006

Felicidad extraordinaria

Dícese de la felicidad de lo más normalita, ordinaria a tope.

Ventaja: Ante un "Cómo estás?" te permite contestar "extraordinariamente feliz", creando reacciones inesperadas.

Corresponde con un índice de felicidad relativa de entre seis y siete.



PD: darte cuenta de que tienes una lavadora por colgar justo antes de salir de casa no tiene precio.

lunes, junio 12, 2006

"There is nothing wrong in growing up, as long as you don't grow old."
Pulp

sábado, junio 10, 2006

Una semana sin escribir aquí, hay que ver. Y eso que durante estos días me he quedado con ganas de escribir sobre varios temas, sobre la muerte y como la vivimos, sobre el amor, sobre las mentiras, sobre el tiempo y seguramente sobre alguna fruslería más que no haría del mundo un sitio mejor ni haría ninguna falta.

Pero esto es así. Dejas un pensamiento en el aire, y no te queda más remedio que cazarlo o dejar pasar los días para que se lo lleven. Pero el jodio no sólo no se va sino que se queda reboloteando con más pensamientos dando la tabarra, sin pedir permiso ni nada.

El otro día al salir de la estación de tren vi el beso más hermoso que he visto en mucho tiempo. Allí, a lo lejos, en medio de la plaza, el atardecer en el cielo y la gente pasando alrededor, se fundían en un abrazo de sus cuerpos y sus labios como si el mundo se hubiese detenido bajo sus piés. Un beso que Klimt no se habría atrevido a pintar. Que ganas me entraron de abrazarles, felicitarles y darles las gracias. (Que conste que no lo digo por pillar cacho, sino porque era algo precioso)

Unos días antes pude escuchar a Albert Espinosa contando su visión de esta vida en la que la muerte es tabú. Y tiene razón, no hablamos de la muerte, y si lo hacemos nos parapetamos tras la broma y el humor. Cuando llega cruda y sin tapujos nos trae el dolor. Y es que la muerte sólo es mala para los que quedan atrás, vivos, preguntándose por qué, cuando a todas luces la muerte resulta más comprensible que la vida.

Toda novela, toda historia, gira entorno a una idea, una moraleja. Y así ocurre en "donde el corazón te lleve", que envuelve con tres vidas de mentira la gran verdad que sólo aprendes viviendo. Que la muerte nos duele no tanto por la ausencia de quien se ha ido, sino por las palabras que no hemos podido decirle.

Albert comentaba que siempre lo peor que puede pasarnos es que nos muramos, y después de todo tampoco es tan malo. Y más allá de sus palabras hay que ver la sonrisa con la que las dice para entenderlas en toda su dimensión.

viernes, junio 02, 2006

"De aquel que opina que el dinero puede hacerlo todo, cabe sospechar con fundamento que será capaz de hacer cualquier cosa por dinero."
Benjamin Franklin