Cerraron Tvlinks, pero apareció
Surfthechannel, que es incluso mejor. Está claro que la gente pide esta clase de sitios, y por cada uno que corten aparecera otro cual cabeza de Hidra.
Así que apenas veo la tele, en parte porque está monopolizada por la parejita de la casa (devoradores de culebrones britanicos [Eastenders, Coronation Street] y australianos, que es lo que se estila aqui, nada de sudamericanos), y en parte porque sólo se pueden ver 3 canales.
Dramas personales a parte, pasemos a revisar las series que he andado viendo ultimamente: (Porque? pues porque me da la gana y es un arrebato de generosidad)
Prision Break (3rd season): La serie perfecta para ver en pareja (a tu novia le gustará Schofield, y a ti te caerá suficientemente bien como para que te de igual que piense en él en pleno revolcón). En la 3a temporada sufre un desbarro considerable, pega unos bandazos descomunales pero no sé como consiguen mantener el tipo (sí, añaden algún personaje más que hará de vuestros revolcones una fiesta bastante concurrida, mentalmente hablando claro).
Merece la pena verla? Bueno, pse, si te has tragado las otras temporadas y no hay nada mejor que hacer...
Flight of the Conchords: Dos jovenes músicos australianos tratan de abrirse camino en Nueva York. Tienen un manager que les busca concirtos a hurtadillas, tienen una fan, y una vida muy muy triste. En cada capítulo se rebozan en lo absurdo, y las canciones surgen en cualquier situación desembocando en videos ridídiculos. Llamadlo infantilismo, oda al surrealismo o siembra de la vergüenza ajena.
Si te gusta la gente curiosa, te gustarán las desventuras de estos pobres diablos. Sonrisa y canciones garantizadas. Un hallazgo.
Californication: Nunca di un duro por el retorno de David "X-files" Duchovny a la televisión. Aquí encarna a un escritor que triunfó hace 5 años con su novela escrita en Nueva York. Ahora vive una crisis de creatividad que empezó cuando se trasladó con su novia a California y se agravó cuando le abandonó por otro, llevándose con ella a la hija que tienen en común. Así que trata de recuperar la inspiración y a su mujer saltando de moza en moza cual ladilla alegre y sin conseguir ni lo uno ni lo otro (más bien las mozas le saltan encima a él, para bien o para mal, pero esa es otra historia).
La serie plantea dos dudas. La primera es si realmente se folla tanto por ahí (sí, allí follan, na de hacer el amor ni na de eso). La segunda es si la intención de los guionistas era escandalizar o si se trata de hacer una crítica bastante inteligente a ciertos aspectos de la vida liberal obsesionada con la imagen, el sexo y el triunfo. Plantean alguna que otra reflexión interesante, y dialogos pirotécnicos.
En cualquier caso no deja indiferente, las actuaciones son muy buenas, y no se anda con remilgos, ni mucho menos. No apta para mentes bienpensantes, y eso es bueno.
LOST: Cuarta temporada, y he de reconocer que no daba un duro por ella tampoco, pero el quinto capítulo ha sido muy bueno. Además parece que están manejando razonablemente bien las once varas en las que se metieron. Como mínimo parece que esquivan el descalabro y apuestan por la intriga de la escala de grises en la que nadie es bueno o malo, sino que se mueven entre medias y la gracia reside en descubrir que pasó y los motivos.
Eli Stone: Comedia de abogados, en el que el protagonista tiene una vida de ensueño hasta que empieza a tener alucinaciones del calibre de encontrarse a George Michael en su salon cantando encima la mesa. Sí, a bote pronto recuerda a Ali McBeal, pero sin toda la carga de estrógenos ni el histerismo parejil de la moza y su troupe. Básicamente Eli tiene que desentrañar el significado de las visiones, que se convierten en señales de que tiene que hacer. Es decir, básicamente lo que todos hemos deseado, señales que nos indiquen el camino, esquivando los errores y llegando a la meta de un destino escrito con tinta china y un extraño sentido del humor.
Un poco previsible, pero se deja ver. Historias que podrían liquidarse en 5 minutos pero duran un poquito más, entre musical y musical. ¿os suena?
Y en la recámara quedan
In treatment, y
The wire