Hay gente que recuerda todo cuanto vive, con vívido detalle, como si fuese ayer mismo. Yo en cambio olvido casi todos los detalles de lo vivido.
No recuerdo mas que un punyado de conversaciones, y las cuatro historias fantasticas que perduran más allá del umbral de la semana que rige el ritmo de mi vida (como maximo dos, no mas de tres). El resto, se evapora en el aire aunque en alguna ocasion vuelva como por sorpresa, y casi nunca en el momento indicado.
Por eso en ocasiones resulta útil tener escritas las reflexiones pasadas, para que no se pierdan en el eter y que haya la remota posibilidad de que alguna vez sean de utilidad. Porque todos sabemos que hay momentos en los que las tinieblas nublan nuestro entendimiento y nos hacen olvidar los porques y los motivos. Por ejemplo la lista de las cosas que te gustan del lugar donde vives, o de tu trabajo, o de tu dia a dia en general. Porque el cansancio y la rutina siempre acaba golpeando y tinye de rutina hasta lo mas extraordinario.
Porque hay cosas que conviene no olvidar.
2 comentarios:
tienes toda la razon me pasa algo muy similar
uffff cuanta razón... no nos damos cuenta de lo que vamos viviendo... vamos pasando hasta que algo nos hunde y parece que nunca vamos a olvidarlo... hasta que pasa el tiempo y tan sólo es un recuerdo... besitos
Publicar un comentario